miércoles, 15 de mayo de 2019

COMENTARIO SONETO GÓNGORA - 29

En este soneto de Luis de Góngora, poeta perteneciente al Siglo de Oro y máximo representante del Culteranismo, plantea un poema formado por dos cuartetos y dos tercetos los cuales se dirigen especialmente a los “amantes” el cual es un vocativo que el autor lo utiliza para llamar la atención.

En el primer cuarteto del soneto, el autor utiliza un gran hipérbaton para explicar al lector lo que los amantes no deben tocar. A continuación en la palabra “dulce” expresa un epíteto en este caso para mostrarnos el sentido del gusto. Además aplica una metáfora en “perlas” refiriéndose a los dientes, que a la vez los compara como si fueran perlas. En el último verso del primer cuarteto el autor emplea un gran número de recursos expresivos. Principalmente se ve el uso de un gran hipérbaton. También el verbo “ministra” al pertenecer del latín recrea el cultismo. Incluso en “el garzón de Ida” se ve una gran perífrasis. Vas exponiendo recursos pero no aterrizas en la intención del autor ni en el mensaje que nos quiere transmitir.

A continuación en el siguiente cuarteto Góngora nos cuenta el porqué de no besar a una mujer hermosa, según su teoría el amor se encuentra entre sus labios, con lo que al besarla se enamoraría y sería un peligro. El autor acaba este cuarteto con una gran comparación “cual entre flor y flor sierpe escondida”. Muy incompleto.

En el primer terceto comienza con una gran comparación “No la engañen las rosas” haciendo referencia a la gran fuerza de persuasión que pueden llegar a tener en este caso en el amor. Y sobre todo en este poema cuando habla de las rosas se refiere a los atractivos de la belleza, por eso es un gran fuerte para el autor. También emplea una combinación entre el color “rojo” y “blanco” refiriéndose a la Aurora y las rosas.

Finalmente en el último terceto en el primer verso nos lleva hacia la mitología “Manzanas son de Tántalo” el cual era un personaje mitológico que fue castigado por los dioses a estar en un lago con el agua al borde de su cuello, teniendo la tentación de unas frutas deliciosas encima suya, pero con el castigo de no poder probar ni un solo pedazo de ninguna de ellas. Con esto refleja una gran visión pesimista haciendo ver que ni el amor puede con la pena.

1 comentario:

  1. Los recursos de este poema ya te los daba yo. Por lo que desarrollar los recursos que hay en cada estrofa no tiene mucho mérito. Te falta "interpretarlos", explicar cómo crees que los utiliza el autor para transmitirnos su mensaje. Y para eso hace falta tranquilidad, tiempo, pensar, esfuerzo... imaginación y creatividad, ponerse en el lugar del autor, no olvidar su estilo (el culteranismo no aparece por ningún sitio, igual tienes que recuperar en la web sus rasgos principales...). Lo puedes hacer mucho mejor y lo has demostrado, pero si tienes en cuenta todo lo que te he dicho antes. Apunta y lo espero la próxima vez. Y vuelve a leer lo que escribes... así podrás corregir los múltiples errores de redacción que comentes (ten en cuenta que no se puede escribir como se habla). ¡Ánimo! Sigo creyendo que puedes. (6)

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